Los armarios antiguos son una pieza clave en la decoración de interiores, ya que aportan un toque de elegancia y nostalgia a cualquier espacio. Sin embargo, a veces puede resultar difícil encontrar bisagras que se adapten a este tipo de muebles tan especiales.
En este post te mostraremos diferentes opciones de bisagras para armarios antiguos, para que puedas encontrar el detalle que marque la diferencia en tu decoración. Además, te daremos algunos consejos para su instalación y te informaremos sobre los precios y materiales disponibles en el mercado.
¿Qué tipos de bisagras hay?
Existen diferentes tipos de bisagras que se utilizan en proyectos de bricolaje. Algunas de las más comunes son las siguientes:
– Bisagras de libro: También conocidas como bisagras de tapa, son ideales para proyectos que requieren una apertura de 180 grados. Se utilizan comúnmente en libros, álbumes de fotos y otros objetos similares.
– Bisagras de piano: Estas bisagras son largas y estrechas, y se utilizan principalmente en puertas que necesitan una apertura completa. Son muy resistentes y duraderas, por lo que se utilizan en proyectos que requieren bisagras de alta calidad.
– Bisagras desmontables: Estas bisagras permiten desmontar fácilmente la puerta o el objeto al que están unidas. Son muy útiles en proyectos donde se requiere un fácil acceso al interior de un mueble o armario.
– Bisagras de pernio o pernios: Son bisagras de pala que se utilizan principalmente en puertas de exterior. Son muy resistentes y se caracterizan por su capacidad para soportar mucho peso.
– Bisagras de doble acción: Estas bisagras permiten la apertura en ambos sentidos, lo que las hace ideales para puertas que se abren en ambos lados. Se utilizan comúnmente en puertas de cocina o en proyectos donde se necesita una apertura fácil de ambos lados.
– Bisagras ocultas o invisibles: Estas bisagras están diseñadas para ser invisibles cuando la puerta está cerrada. Son muy estéticas y se utilizan en proyectos donde se busca un aspecto limpio y minimalista.
– Bisagras de cazoleta: Estas bisagras se caracterizan por tener una cazoleta en la que se encaja la parte del pernio de la bisagra. Son muy utilizadas en muebles de cocina y armarios.
– Bisagras de superficie, easy, o sin cazoleta: Estas bisagras se instalan en la parte exterior de la puerta o mueble, sin necesidad de realizar una cazoleta. Son fáciles de instalar y se utilizan comúnmente en proyectos de bricolaje.
¿Cómo se llaman las bisagras para alacenas?
El tipo de bisagra más común en muebles de cocina es la bisagra de cazoleta. La distinguirás fácilmente porque es invisible desde el exterior y porque se compone de dos piezas: La cazoleta, que se fija al interior del mueble y que está diseñada para contener el resorte de la bisagra cuando la puerta se cierra.
Estas bisagras son ideales para alacenas y muebles con puertas que requieren un movimiento suave y sin esfuerzo. Además, su diseño oculto proporciona un aspecto estético y limpio a los muebles de cocina. Las bisagras de cazoleta permiten ajustar la posición de la puerta vertical y horizontalmente, lo que facilita su instalación y ajuste. Además, algunas de estas bisagras cuentan con un mecanismo de cierre suave, que permite que la puerta se cierre de forma silenciosa y sin golpes.
¿Cómo se llaman las bisagras para puertas de melamina?
La bisagra tipo cazoleta o también conocida como bisagra «cangrejo» es el tipo de bisagra utilizado específicamente para puertas de melamina. Este tipo de bisagra es ideal para la instalación y apertura de puertas en muebles fabricados con melamina, así como en puertas con marcos de aluminio.
La característica principal de esta bisagra es su sistema de cazoleta que permite que quede oculta al cerrar la puerta, lo que brinda un acabado estético y limpio al mueble. Además, su diseño permite un fácil ajuste y regulación de la puerta en cuanto a altura, profundidad y alineación.
¿Cuántas bisagras se necesitan para una puerta?
La cantidad de bisagras necesarias para una puerta depende del alto de la misma. En general, se recomienda utilizar al menos 2 bisagras para una puerta estándar de 1,5 metros de altura. Estas bisagras se colocan en la parte superior e inferior de la puerta para proporcionar estabilidad y permitir un movimiento suave al abrir y cerrar.
Para puertas más altas, como aquellas que miden entre 1,5 y 2,25 metros, se recomienda utilizar 3 bisagras. En este caso, se colocan dos bisagras en la parte inferior de la puerta y una en la parte superior. Esto ayuda a distribuir mejor el peso de la puerta y garantizar un funcionamiento adecuado.
En el caso de puertas aún más altas, se recomienda utilizar 4 bisagras. Estas se colocan en la parte inferior, media y superior de la puerta para proporcionar una mayor estabilidad y soporte. Es importante asegurarse de que las bisagras estén correctamente instaladas y sean de buena calidad para garantizar la durabilidad y seguridad de la puerta.