Los burletes para puertas exteriores son una solución eficaz y económica para proteger tu hogar del frío. Estos accesorios se colocan alrededor de la puerta para evitar que entre aire frío y mantener el calor en el interior de tu casa. Además, también son útiles para prevenir la entrada de polvo, ruido y humedad. En este post te presentamos diferentes opciones de burletes para puertas exteriores, sus características y precios, para que puedas elegir el que mejor se adapte a tus necesidades y presupuesto.
¿Qué se pone en las puertas para que no entre el aire?
Para evitar que entre aire por las puertas, se recomienda colocar burletes de aislamiento. Estos burletes son tiras de material flexible que se adhieren a los marcos de las puertas y ventanas, sellando eficazmente las rendijas por donde pueda filtrarse el aire. Este aislamiento es especialmente útil durante los meses de invierno, ya que evita la entrada de frío y la pérdida de calor, lo que permite ahorrar energía y mantener una temperatura más confortable en el interior de la vivienda.
Los burletes de aislamiento son aptos para todo tipo de puertas y espacios, y se instalan de manera sencilla. Pueden encontrarse en diferentes materiales, como goma o silicona, y en distintos tamaños para adaptarse a las necesidades de cada puerta. Al colocarlos correctamente, se consigue un sellado efectivo que impide la entrada de corrientes de aire, polvo y ruido, mejorando así el confort y la calidad de vida en el hogar. Además de su funcionalidad, los burletes también pueden tener un diseño estético que se adapte al estilo de la puerta, lo que los convierte en una solución eficiente y decorativa.
¿Qué tipos de burletes hay?
Existen diferentes tipos de burletes que se utilizan para aislar puertas y ventanas y evitar la entrada de aire frío en el interior de la vivienda.
Uno de los tipos más comunes son los burletes de espuma, que son fáciles de instalar y se adaptan a cualquier tipo de superficie. Estos burletes suelen estar fabricados con materiales resistentes al frío y proporcionan un buen sellado para evitar las corrientes de aire.
Otro tipo de burletes son los de goma, que son muy duraderos y flexibles. Estos burletes se colocan en el marco de la puerta o ventana y forman un sello hermético que impide la entrada de aire frío.
También existen burletes de silicona, que son muy eficientes para sellar las rendijas y grietas en puertas y ventanas. Estos burletes son flexibles y se adaptan a cualquier tipo de superficie, proporcionando un sellado hermético.
Los burletes de PVC también son una opción popular. Estos burletes son resistentes y duraderos, y se pueden encontrar en diferentes tamaños y formas para adaptarse a las necesidades de cada puerta o ventana.
A la hora de colocar burletes, es importante tener en cuenta algunos consejos. Primero, se debe limpiar y secar bien la superficie antes de colocar el burlete, para asegurar una buena adherencia. También es recomendable medir correctamente la longitud del burlete y recortarlo si es necesario, para garantizar un ajuste perfecto. Finalmente, se debe presionar firmemente el burlete contra la superficie para asegurar un sellado adecuado.
¿Qué puedo hacer para evitar que entre frío por debajo de la puerta?
Una forma efectiva de evitar que entre frío por debajo de la puerta es utilizar un burlete. El burlete es una tira que se coloca en la parte inferior de la puerta para sellar cualquier espacio por donde pueda filtrarse el aire frío. Existen diferentes tipos de burletes en el mercado, pero uno de los más recomendados es el burlete de PVC rígido de 93,5 cm de longitud, como el modelo Lepanto.
El burlete Lepanto es ideal para reducir ruidos y mantener fuera los insectos, polen y polvo. Su diseño rígido permite que se ajuste perfectamente a la puerta, evitando cualquier corriente de aire frío. Además, se puede cortar el burlete a la medida de la puerta, lo que lo hace adaptable a diferentes tamaños.
Para instalar el burlete Lepanto, simplemente se debe medir la longitud de la puerta y cortar el burlete a esa medida. Luego, se coloca en la parte inferior de la puerta, asegurándose de que esté bien ajustado. En caso de ser necesario, se puede utilizar una sierra para cortar el burlete, ya que al ser rígido requiere de esta herramienta para adaptarlo.
¿Cómo se llama lo que se pone en las puertas para evitar el frío?
Los burletes son elementos que se colocan en las puertas para evitar la entrada de aire frío y el escape del aire caliente de una habitación. Se trata de una tira de material flexible, como goma o silicona, que se instala en los marcos de las puertas, sellando cualquier rendija o espacio por donde pueda filtrarse el frío.
Existen diferentes tipos de burletes según el sistema de apertura de la puerta. Por ejemplo, para puertas corredizas se utilizan perfiles en forma de «E» que se adaptan a las rendijas de diferentes tamaños, desde 2 hasta 3,5 mm. Para puertas abatibles, por otro lado, se utilizan burletes específicos que se colocan en el marco de la puerta para sellar la junta entre la puerta y el marco.
Es importante elegir el burlete adecuado según las necesidades específicas de cada puerta. Además de evitar la entrada de frío, los burletes también ayudan a reducir la entrada de ruido y a mejorar la eficiencia energética de la vivienda, al evitar fugas de calor. Por lo tanto, son una solución eficaz y económica para mantener una temperatura agradable en el interior de los espacios durante los meses más fríos del año.
¿Qué se pone debajo de la puerta para que no entre el frío?
Para evitar que entre el frío por debajo de la puerta, se pueden utilizar burletes especiales para puertas y bajos de puerta. Estos burletes son elementos que se colocan en la parte inferior de la puerta para aislar del frío, insectos o suciedad. Su función principal es sellar las puertas y las ventanas, evitando las filtraciones de aire a través de las pequeñas rendijas que pueden quedar entre las puertas y ventanas, incluso cuando están cerradas.
Los burletes de aislamiento son una solución eficaz y sencilla para mejorar el confort térmico de un espacio, ayudando a mantener una temperatura agradable en el interior y reduciendo la pérdida de calor. Además, también contribuyen a ahorrar energía, ya que evitan que se escape el calor generado por la calefacción. Estos burletes suelen estar fabricados con materiales flexibles, como goma o silicona, que se adaptan al contorno de la puerta y proporcionan un cierre hermético.