El fregadero es uno de los elementos más importantes en una cocina. No solo es necesario para lavar los platos y los utensilios de cocina, sino que también puede ser una pieza clave en la decoración de este espacio. Si estás buscando un fregadero que combine estilo y funcionalidad, el fregadero 86×50 es la opción perfecta para ti.
¿Cuál es la medida estándar de un fregadero?
La medida estándar de un fregadero puede variar dependiendo de su tamaño. Por lo general, las piletas grandes tienen un largo de 80 cm en adelante, lo que las hace ideales para cocinas espaciosas donde se requiere un fregadero de mayor capacidad. Los fregaderos medianos, por su parte, ocupan aproximadamente 70 cm de largo, siendo una opción adecuada para cocinas de tamaño medio. Finalmente, los fregaderos pequeños tienen un tamaño inferior a los 70 cm de largo, siendo ideales para cocinas con espacio limitado.
En cuanto a la profundidad de los fregaderos, esta suele variar entre 45 y 65 cm, independientemente de su tamaño. Esto permite que se puedan lavar utensilios de cocina de diferentes tamaños y facilita la tarea de lavado. La altura de los fregaderos, por otro lado, suele oscilar entre 14 y 30 cm.
| Tamaño | Largo | Profundidad | Altura |
|---|---|---|---|
| Piletas grandes | 80 cm en adelante | 45-65 cm | 14-30 cm |
| Fregaderos medianos | 70 cm | 45-65 cm | 14-30 cm |
| Fregaderos pequeños | Menos de 70 cm | 45-65 cm | 14-30 cm |
¿Cómo tomar las medidas del fregadero de cocina?
Para tomar las medidas del fregadero de cocina, es importante tener en cuenta el espacio disponible en el frente de la cocina y el ancho del mueble donde se va a montar el fregadero. Medir el espacio total te permitirá elegir un fregadero que se ajuste correctamente y evite problemas de instalación.
Además, es recomendable dejar una distancia mínima de 60 cm entre la placa de cocinar y el fregadero para garantizar un espacio suficiente para trabajar cómodamente. Esto evitará que los utensilios o recipientes calientes puedan dañar el fregadero o causar accidentes.
Una vez que hayas tomado las medidas necesarias, podrás elegir el fregadero que se ajuste perfectamente a tu cocina y a tus necesidades. Recuerda que existen distintos tipos de fregaderos, como los de un seno, los de dos senos o los fregaderos con escurridor, por lo que deberás tener en cuenta también el espacio disponible en el mueble para garantizar una instalación correcta.
¿Cuál es la medida de un fregadero doble?
Las medidas más habituales de un fregadero doble son de 60 cm de ancho. Sin embargo, también podemos encontrar modelos de fregaderos de dos senos para muebles de 80 cm e incluso de 90 cm, lo que nos permite disponer de dos senos con bastante capacidad y escurridor.
Estas medidas son ideales para aquellos que necesitan un fregadero con espacio suficiente para lavar platos, ollas y utensilios de cocina de manera cómoda. Además, algunos modelos incluyen un escurridor, lo que facilita el secado de los utensilios y evita que el agua se acumule en el fregadero.
Es importante tener en cuenta el espacio disponible en la cocina a la hora de elegir el tamaño del fregadero doble. Además, es recomendable considerar la distribución de la cocina y la ubicación de otros elementos, como la encimera y los armarios, para asegurarnos de que el fregadero se ajuste correctamente al espacio disponible.
¿Qué profundidad tiene un fregadero?
En cuanto a la profundidad de un fregadero, la medida más común es de aproximadamente 20 cm. Esta profundidad es suficiente para la mayoría de las tareas de lavado de platos y utensilios de cocina. Sin embargo, en cocinas profesionales o en aquellos hogares donde se cocina en grandes cantidades, es posible encontrar fregaderos más profundos, con cubetas de hasta 50 cm de hondura.
Estos fregaderos profundos ofrecen varias ventajas. En primer lugar, permiten lavar ollas y cacerolas grandes sin problemas, ya que su profundidad es suficiente para sumergirlas completamente y limpiarlas de manera efectiva. Además, al tener más espacio vertical, se evita que salpique agua o detergente fuera del fregadero durante el lavado. Por último, los fregaderos profundos también son útiles para lavar alimentos, como frutas y verduras, ya que su mayor altura facilita la tarea y evita que el agua se desborde.