Si estás buscando una forma fácil y rápida de añadir estilo y elegancia a las puertas de tu hogar, un kit de molduras decorativas es la solución perfecta. Estas molduras son una manera sencilla de transformar cualquier puerta en una pieza de arte y darle un toque único a tu hogar.
¿Cómo se llaman las molduras de las puertas?
Las molduras para puertas de interior también se conocen como jambas o tapetas, mientras que al conjunto completo se le llama “guarnición”. La palabra jamba procede del árabe y significa “pierna” o “pata”; de hecho, cuando las jambas verticales se unen a tope con la horizontal también reciben el nombre de “patas”.
Las molduras de las puertas cumplen varias funciones. En primer lugar, tienen un carácter estético, ya que añaden detalles y ornamentos a la puerta, embelleciendo el espacio. Además, también tienen una función práctica, ya que ayudan a proteger los bordes de la puerta de golpes y rozaduras. Además, las molduras pueden actuar como aislante térmico y acústico, ya que ayudan a reducir la transmisión de calor y ruido entre las habitaciones. En cuanto a los materiales, las molduras de las puertas suelen estar hechas de madera, aunque también se pueden encontrar en otros materiales como el PVC o el metal.
¿Qué tipo de molduras hay?
Existen diferentes tipos de molduras que se utilizan para decorar y embellecer espacios interiores. Algunos de los tipos más comunes son los paneles, los perfiles y las cornisas.
Los paneles decorativos son elementos que se encolan en cualquier superficie, ya sea paredes, techos o muebles, y aportan dimensión y textura al espacio. Estos paneles pueden tener diferentes diseños y acabados, desde lisos y elegantes hasta con relieves y detalles más elaborados. Además de su función estética, también pueden servir como aislante acústico o térmico en algunos casos.
Los perfiles, por otro lado, son molduras alargadas que se utilizan para crear marcos y paneles en las paredes. Estos perfiles pueden ser de diferentes tamaños y formas, y se pueden utilizar para separar colores en las paredes o para enmarcar papel pintado. También se pueden utilizar como elementos decorativos en sí mismos, creando diseños geométricos o patrones en las paredes.
Por último, las cornisas son molduras que se instalan en la parte superior de las paredes, justo donde se unen con el techo. Estas cornisas pueden tener diferentes diseños, desde simples y rectas hasta más elaboradas y decorativas. Además de su función estética, también pueden servir para ocultar cables o para dar un acabado más elegante a la unión entre la pared y el techo.
¿Qué material se usa para las molduras?
El poliuretano, el yeso y la madera son algunos de los materiales más utilizados de manera habitual para las molduras innovadoras. El poliuretano es un material plástico que se utiliza para crear molduras duraderas y resistentes. Es fácil de trabajar y se puede moldear en una variedad de diseños, lo que lo convierte en una opción popular para molduras modernas y ornamentadas.
El yeso, por otro lado, es un material tradicional utilizado durante siglos en la fabricación de molduras. Es un material versátil que puede ser tallado a mano o moldeado en moldes para crear diseños intrincados. El yeso es una opción popular para molduras más clásicas y elegantes, ya que ofrece una apariencia suave y refinada.
La madera también es un material ampliamente utilizado en la fabricación de molduras. La madera dura, como la caoba o el roble, es especialmente popular debido a su apariencia estética y su resistencia ante posibles grietas. La madera se puede tallar y dar forma fácilmente, lo que permite la creación de diseños personalizados y detallados.
¿Qué es la tapeta de la puerta?
La tapeta de la puerta, también conocida como jamba, es un elemento que se utiliza para cubrir la unión entre la pared y la puerta. Se trata de un marco que se instala alrededor del perímetro de la puerta, proporcionando un acabado estético y funcional.
La tapeta de la puerta puede ser fabricada en diferentes materiales, como madera, PVC o metal, y puede tener diferentes diseños y acabados. Además de su función estética, la tapeta también cumple con otros propósitos. Por un lado, ayuda a proteger la puerta y la pared de posibles daños causados por el roce o golpes. Por otro lado, también ayuda a mantener la puerta en su lugar y proporciona un sello hermético, evitando la entrada de corrientes de aire o ruidos.
En cuanto a su instalación, la tapeta se coloca alrededor del marco de la puerta, fijándola a la pared mediante clavos o tornillos. Es importante que la tapeta esté correctamente nivelada y alineada para obtener un resultado óptimo. Además, se puede complementar con otros elementos como rodapiés o molduras para crear un conjunto armonioso.