Una barandilla es un elemento esencial en cualquier espacio en el que se requiera protección y seguridad. Ya sea en una escalera, un balcón o una terraza, las barandillas cumplen la función de evitar caídas accidentales y brindar estabilidad a quienes transitan por esos lugares. Además de su utilidad práctica, las barandillas también pueden ser un elemento decorativo que añade estilo y personalidad a la estructura en la que se instalan. En este post, te contaremos todo lo que necesitas saber sobre las barandillas: desde los materiales más comunes hasta las normativas de seguridad que deben cumplir. ¡Sigue leyendo para descubrir por qué las barandillas son una protección imprescindible!
¿Qué es una barandilla de seguridad?
Una barandilla de seguridad, también conocida como guardacuerpo, es un elemento que se utiliza para proteger contra los riesgos de caídas fortuitas al vacío de personas que trabajan o circulan cerca de un borde elevado, como balcones, terrazas, escaleras o plataformas. Estas barandillas están diseñadas con el propósito de evitar accidentes y brindar seguridad a las personas que se encuentran en esos espacios.
La función principal de una barandilla de seguridad es actuar como una barrera física que impide que las personas se caigan o pierdan el equilibrio y caigan al vacío. Están construidas con materiales resistentes y duraderos, como acero, hierro forjado o aluminio, y se instalan de manera que sean lo suficientemente altas y sólidas como para evitar cualquier posible accidente. Además, su diseño debe cumplir con ciertos estándares de seguridad establecidos por las normativas vigentes.
¿Cuándo es necesaria una barandilla?
La instalación de una barandilla es necesaria cuando hay más de 70 centímetros de desnivel. Esto se aplica tanto en espacios interiores como exteriores, como por ejemplo en escaleras, balcones, terrazas o pasarelas elevadas. La barandilla tiene como principal función proporcionar seguridad y protección a las personas, evitando caídas o accidentes. Además, también puede servir como elemento decorativo, dando un toque estético a la estructura.
En el caso de edificios de varias plantas, como una segunda o tercera planta, la altura de la barandilla debe ser de 90 centímetros. Esta medida está establecida por las normativas de seguridad y tiene como objetivo prevenir accidentes y garantizar la protección de los usuarios. Es importante tener en cuenta que estas medidas pueden variar dependiendo de las regulaciones específicas de cada país o región.
¿Cuántos tipos de barandillas hay?
Existen varios tipos de barandillas que se pueden utilizar en diferentes áreas de una vivienda, especialmente en escaleras interiores. Algunos de los tipos más comunes son:
- Barandillas de madera: Este tipo de barandilla aporta un aspecto cálido y clásico a cualquier espacio. Pueden ser fabricadas en diferentes tipos de madera, como roble o pino, y se pueden personalizar con diferentes diseños y acabados.
- Barandillas de acero inoxidable: Estas barandillas son muy duraderas y fáciles de mantener. Su aspecto moderno y elegante las convierte en una opción popular para escaleras interiores. Además, el acero inoxidable es resistente a la corrosión, por lo que es ideal para áreas húmedas como baños o cocinas.
- Barandillas de cristal: Las barandillas de cristal son ideales para aquellos que buscan un diseño minimalista y contemporáneo. El cristal templado utilizado en estas barandillas es muy resistente y seguro, lo que las convierte en una opción popular para escaleras interiores. Además, permiten que la luz pase a través de ellas, lo que crea una sensación de amplitud en el espacio.
Estos son solo algunos ejemplos de los tipos de barandillas disponibles en el mercado. Cada tipo tiene sus propias ventajas y características, por lo que es importante elegir el que mejor se adapte a tus necesidades y preferencias estéticas.
¿Cómo se le llama a la barandilla de la escalera?
El pasamanos es una barandilla que se encuentra en la escalera y que proporciona soporte y seguridad a las personas al subir o bajar. Su principal función es evitar caídas y permitir un agarre firme durante el recorrido. Los pasamanos pueden estar diseñados en diferentes materiales, como metal, madera, materiales a base de madera o plástico, dependiendo del estilo y la funcionalidad que se desee lograr.
En la mayoría de los casos, los pasamanos se colocan a lo largo de un lado de la escalera, aunque también pueden estar presentes en ambos lados para brindar mayor estabilidad. Además, los pasamanos suelen estar ubicados a una altura cómoda para que las personas puedan tener un agarre adecuado, generalmente a la altura de la cintura.
Es importante destacar que los pasamanos no solo se encuentran en las escaleras tradicionales, sino que también están presentes en escaleras mecánicas, donde desempeñan la misma función de proporcionar apoyo y seguridad a los usuarios. En resumen, los pasamanos son elementos esenciales en las escaleras que brindan protección y estabilidad a las personas al subir o bajar, evitando posibles accidentes y caídas perjudiciales.