Si estás buscando una opción duradera y elegante para tus uñas, no busques más. Los colores de shellac son la elección perfecta para lucir unas uñas impecables durante semanas. Ya sea que estés buscando un tono clásico y sofisticado o un color vibrante y llamativo, el shellac tiene una amplia gama de opciones para satisfacer todos los gustos. En este post, te presentaremos los colores más populares del shellac y te daremos algunos consejos para mantener tus uñas siempre radiantes. ¡Prepárate para lucir uñas de ensueño con el shellac!
¿Qué es el color Shellac?
Shellac es un esmalte revolucionario que ha ganado popularidad en la industria de la belleza por sus resultados espectaculares tanto en manicura como en pedicura. Este esmalte de uñas de alta calidad ofrece una aplicación fácil y rápida, permitiendo obtener un acabado impecable en cuestión de minutos. La principal característica de Shellac es su duración increíble de 14 días, durante los cuales se mantiene el brillo y la intensidad del color sin necesidad de retoques.
Lo que hace especial al color Shellac es su fórmula innovadora que combina lo mejor de un esmalte tradicional con las ventajas de un gel. Gracias a esto, el color Shellac se adhiere perfectamente a la uña, evitando que se desprenda o se astille con facilidad. Además, este esmalte proporciona una protección extra a la uña, evitando la fragilidad y el amarilleado que suelen aparecer con el uso frecuente de otros esmaltes.
¿Cuánto tiempo dura el Shellac en las uñas?
El Shellac es una técnica semipermanente que combina esmalte y gel, lo que lo hace duradero en comparación con los esmaltes tradicionales. Normalmente, este tipo de manicura dura alrededor de 14 días, aunque puede llegar a prolongarse hasta 3 semanas dependiendo del crecimiento de tus uñas. Esto significa que podrás disfrutar de un esmalte casi intacto durante aproximadamente 15 días. ¡Es una excelente noticia para todas las amantes de las uñas impecables!
La gran ventaja del Shellac es que, a diferencia de los esmaltes convencionales, no se desconcha ni pierde brillo con facilidad. Además, su fórmula especial permite que se adhiera mejor a la uña, evitando que se desprenda o se desprenda con el uso diario. Incluso cuando las uñas empiezan a crecer, el esmalte se mantiene en buen estado, lo que significa que no tendrás que preocuparte por retocarlo constantemente. ¡Podrás lucir unas uñas perfectas durante mucho más tiempo!
¿Qué es mejor, Shellac o acrílico?
La elección entre Shellac y acrílico depende de tus preferencias y necesidades individuales. Ambos tienen sus ventajas y desventajas, por lo que es importante considerarlas antes de tomar una decisión.
El Shellac es un tipo de esmalte de uñas híbrido que combina las ventajas de los geles y los esmaltes tradicionales. Se aplica como un esmalte de uñas regular, pero se endurece bajo una lámpara UV. La principal ventaja del Shellac es que es más duradero y resistente al astillado en comparación con los esmaltes normales. Además, se seca rápidamente y no requiere limado o lijado de las uñas naturales antes de la aplicación. Sin embargo, el Shellac puede ser más difícil de quitar en comparación con los esmaltes normales, ya que generalmente requiere un proceso de remojo o envoltura en papel de aluminio con acetona.
Por otro lado, el acrílico es un material artificial que se aplica sobre las uñas naturales o sobre tips para alargarlas. Es más resistente que el Shellac y puede soportar más abuso diario. Además, el acrílico se puede moldear para crear diferentes formas y estilos de uñas. Sin embargo, el acrílico puede ser más dañino para las uñas naturales, ya que se requiere limado y lijado para su aplicación y eliminación. Además, el proceso de aplicación del acrílico puede ser más largo y requiere más habilidad por parte del técnico de uñas.
¿Cuánto cuesta el Shellac?
El precio del Shellac varía dependiendo del tipo de manicura que elijas. Por ejemplo, la manicura Shellac de larga duración tiene un costo de 12,00€. Este servicio incluye el retiro del esmalte anterior, empujar las cutículas y aplicar el esmalte Shellac, que ofrece una mayor durabilidad en comparación con el esmalte tradicional.
Si prefieres una manicura completa tradicional, que incluye el retiro del esmalte anterior, limado, cuidado de las cutículas, esmaltado tradicional, aceite para las cutículas, peeling, hidratación profunda y un masaje, el precio es de 18,50€. Este servicio ofrece un tratamiento completo para tus uñas, dejándolas cuidadas e hidratadas.
¿Qué es el esmaltado permanente Shellac?
El esmaltado permanente Shellac es un sistema revolucionario que permite aplicar sobre la uña un esmalte de alto brillo con una durabilidad muy superior a la de los tradicionales. Este tipo de esmalte se ha convertido en el favorito de muchas personas, ya que ofrece una gran resistencia al desgaste y a las roturas, evitando que el esmalte se desprenda o se astille.
La principal diferencia entre el esmaltado permanente Shellac y los esmaltes tradicionales radica en su proceso de aplicación y en la tecnología utilizada. Mientras que los esmaltes normales se secan al aire, el Shellac se seca en una lámpara UV o LED, lo que permite que el esmalte se adhiera de forma más duradera a la uña.
Otra ventaja del esmaltado permanente Shellac es que no requiere de un largo tiempo de secado, ya que se seca de forma instantánea bajo la lámpara. Además, ofrece una gran variedad de colores y acabados, desde los clásicos tonos rojos y rosados hasta los más atrevidos y llamativos. También es posible realizar diseños y decoraciones sobre el esmalte, ofreciendo infinitas posibilidades de personalización.
En cuanto a la duración, el esmaltado permanente Shellac puede mantenerse intacto durante aproximadamente dos semanas, sin perder su brillo ni su color. Esto lo convierte en una opción ideal para aquellas personas que desean lucir unas uñas perfectas durante más tiempo, sin tener que preocuparse por retocar constantemente el esmalte.
Para retirar el esmalte permanente Shellac, es necesario acudir a un salón de belleza o a un profesional capacitado, ya que se requiere de un proceso específico que garantice la correcta eliminación del esmalte sin dañar la uña natural. Este proceso suele consistir en la aplicación de un líquido removedor y el uso de una lima suave para retirar los restos de esmalte.