Las sillas de paseo son un elemento esencial para los padres que necesitan salir de casa con sus hijos pequeños. Pero, ¿qué sucede cuando los niños ya han superado los 15 kg de peso y las sillas convencionales no son lo suficientemente cómodas ni seguras? En este post te presentamos una selección de sillas de paseo especialmente diseñadas para niños de 20 kg, que garantizan la máxima comodidad y seguridad durante los paseos en familia.
¿Cuántos kilos puede soportar una silla de paseo?
Una silla de paseo está diseñada para soportar el peso de un niño pequeño mientras se desplaza cómodamente. La capacidad de peso máximo puede variar según el modelo y la marca de la silla de paseo, pero en general, la mayoría de las sillas de paseo pueden soportar hasta 15 kg.
Es importante tener en cuenta que esta capacidad de peso máximo se refiere al peso del niño y no incluye el peso de otros objetos que se puedan colocar en la silla de paseo, como bolsas de pañales o pertenencias personales. Si se excede el límite de peso recomendado, la silla de paseo puede verse comprometida en términos de seguridad y comodidad para el niño.
Es recomendable revisar las especificaciones del fabricante de la silla de paseo antes de realizar la compra, ya que algunos modelos pueden tener una capacidad de peso máximo diferente. Además, es importante tener en cuenta que a medida que el niño crezca, es posible que se deba considerar la transición a una silla de paseo más resistente que pueda soportar un mayor peso. En general, es importante seguir las recomendaciones del fabricante y utilizar la silla de paseo de manera segura y adecuada para garantizar el bienestar del niño durante los paseos.
¿Cuándo dejar de usar la silla de paseo?
Una vez que el niño ha alcanzado los tres años de edad, es el momento ideal en el que está preparado para dejar atrás la silla de paseo. A partir de esta edad, los niños ya tienen suficiente equilibrio y coordinación motora para caminar largas distancias sin problemas. Además, su desarrollo físico y muscular les permite aguantar el peso de su propio cuerpo durante períodos prolongados de tiempo.
Dejar de utilizar la silla de paseo a los tres años también es beneficioso para el niño desde el punto de vista del desarrollo emocional y social. Caminar de forma independiente le permite explorar su entorno de manera más activa y desarrollar su autonomía. Además, le brinda la oportunidad de interactuar más con otras personas, como sus padres, hermanos o amigos, ya que no estará limitado por el espacio reducido de la silla de paseo.
¿Cómo se llaman las sillas para bebés?
Una silla para auto, también conocida como sistema de retención infantil, butaca de seguridad, autoasiento o silla infantil, es el sistema de retención idóneo cuando los niños viajan en auto. Estas sillas están diseñadas específicamente para proteger a los bebés y niños pequeños en caso de accidente de tráfico, y cumplen con estrictas normas de seguridad.
Las sillas para bebés suelen estar fabricadas con materiales acolchados y resistentes, con sistemas de sujeción como arneses de cinco puntos para garantizar la máxima seguridad. Además, suelen contar con protecciones laterales para absorber la energía en caso de impacto. Existen diferentes tipos de sillas para bebés, adaptadas a las distintas etapas de crecimiento y peso del niño. Algunos modelos son convertibles, lo que significa que pueden adaptarse a medida que el bebé crece, permitiendo así su uso durante varios años.
¿Cuándo se empieza a usar la silla ligera?
La silla ligera es una opción ideal para cuando el bebé ya ha crecido y necesita un asiento más cómodo y amplio. A diferencia de las sillas de paseo tradicionales, las sillas ligeras se caracterizan por ser más compactas y fáciles de manejar, lo que las hace perfectas para viajar o para usar en espacios reducidos.
Se recomienda utilizar la silla ligera cuando el pequeño ya tiene al menos seis meses de edad y es capaz de sentarse por sí mismo. A esta edad, los bebés ya han desarrollado suficiente fuerza muscular y control de la cabeza y el cuello para poder sentarse de forma segura en una silla ligera.
Las sillas ligeras suelen tener un respaldo reclinable, lo que permite que el bebé descanse y se sienta cómodo durante los paseos. Además, suelen contar con arneses de seguridad de cinco puntos para mantener al bebé sujeto de forma segura en la silla.
Al elegir una silla ligera, es importante tener en cuenta el peso máximo que puede soportar, así como la calidad de los materiales y la facilidad de plegado y transporte. También es recomendable buscar sillas que cuenten con capotas ajustables para proteger al bebé del sol y la lluvia.
¿Cuándo se debe colocar al bebé mirando hacia adelante en la silla de paseo?
El momento adecuado para colocar al bebé mirando hacia adelante en la silla de paseo varía según la etapa de desarrollo de cada niño. La posición de viaje a favor de la marcha implica que el bebé mira hacia adelante, en dirección a la marcha. Sin embargo, los expertos en seguridad infantil recomiendan que los bebés se mantengan en la posición a contramarcha el mayor tiempo posible, ya que esta posición ofrece una mayor protección en caso de accidente.
La silla de paseo a contramarcha es aquella en la que el bebé va mirando hacia atrás, es decir, en dirección contraria a la marcha. Esta posición es más segura porque distribuye mejor las fuerzas en caso de colisión, protegiendo la cabeza, cuello y columna vertebral del bebé. Además, en caso de frenazo brusco, la fuerza se distribuye por todo el respaldo y no se concentra solo en el cuello del bebé.
La Asociación Española de Pediatría recomienda utilizar la silla de paseo a contramarcha al menos hasta los 15 meses de edad del bebé. Sin embargo, algunos expertos sugieren que se espere hasta los cuatro años para cambiar a la posición de viaje a favor de la marcha. Esto se debe a que el cuello y la columna vertebral de los niños están aún en desarrollo y no tienen la fuerza suficiente para soportar un impacto en la posición de viaje a favor de la marcha.