En la búsqueda de garantizar la seguridad en nuestro hogar, es esencial contar con los elementos necesarios para hacer frente a cualquier emergencia. Uno de los dispositivos más importantes para prevenir y controlar incendios es el extintor. En este post, te presentamos el extintor 21a-113b Leroy Merlin, una opción confiable y eficiente para proteger tu hogar.
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¿Qué significa el extintor 21 a 113b?
El código 21 A ó 113 B en un extintor se refiere a su capacidad de apagar diferentes tipos de fuegos. En este caso, se trata de un extintor de polvo ABC de 9 kg. La eficacia de un extintor se designa mediante un código formado por un valor numérico que indica el tamaño del fuego que puede apagar. Este valor se determina mediante un ensayo normalizado para cada clase de fuego, según la norma UNE 23 110.
El código 21 A se refiere a la capacidad de apagar fuegos de clase A, que son los fuegos que involucran materiales sólidos combustibles como papel, madera o tela. Por otro lado, el código 113 B indica que el extintor también puede apagar fuegos de clase B, que son los fuegos que involucran líquidos inflamables como gasolina, aceite o pintura. Además, el extintor de polvo ABC es capaz de apagar fuegos de clase C, que son los fuegos que involucran equipos eléctricos energizados.
¿Qué significa 27a en un extintor?
El número 27a en un extintor hace referencia a la cantidad de combustible que contiene el hogar tipo. En este caso, el número 27 indica la capacidad del extintor en litros, es decir, que puede contener 27 litros de agente extintor. La letra «a» indica la clase de fuego para la cual está diseñado el extintor. En el caso de la letra «a», se refiere a la clase A de fuegos, que son aquellos que involucran materiales combustibles sólidos como papel, madera o telas.
Es importante tener en cuenta que los extintores suelen tener diferentes capacidades y clasificaciones, cada uno diseñado para combatir un tipo específico de fuego. La clasificación de los extintores se divide en diferentes clases: A, B, C, D y F. La clase A se refiere a fuegos en materiales combustibles sólidos, la clase B a fuegos en líquidos inflamables, la clase C a fuegos en gases inflamables, la clase D a fuegos en metales combustibles y la clase F a fuegos en aceites y grasas de cocinas. Por lo tanto, el extintor con la etiqueta 27a está diseñado para combatir fuegos de clase A, es decir, fuegos en materiales sólidos combustibles.
¿Qué es un extintor de clase B?
Un extintor de clase B es un dispositivo utilizado para extinguir incendios en los que el combustible es líquido, como el aceite, la gasolina o la pintura. Estos extintores están diseñados específicamente para combatir este tipo de fuegos y están equipados con agentes extintores adecuados para sofocar las llamas y evitar su propagación.
Los extintores de clase B suelen contener agentes extintores como polvo químico seco o espuma, que actúan de manera eficaz para sofocar los fuegos causados por líquidos inflamables. Estos agentes actúan sobre el fuego de varias maneras: el polvo químico seco interrumpe la reacción en cadena necesaria para que el fuego se mantenga, mientras que la espuma forma una capa que sofoca las llamas y evita la liberación de vapores inflamables.
¿Cómo puedo saber el modelo de un extintor?
Para saber el modelo de un extintor, es necesario buscar la etiqueta que se encuentra generalmente en la parte frontal o lateral del dispositivo. En dicha etiqueta, se indicará información relevante como el modelo, la marca y las características específicas del extintor. Además, es posible que también se encuentren otros datos como la capacidad de extinción, la fecha de fabricación y la fecha de vencimiento del extintor.
Es importante mencionar que cada extintor está diseñado para apagar ciertos tipos de fuegos, por lo que se clasifican en diferentes categorías. En la etiqueta, encontrará que cada extintor es de Clase A, Clase B, Clase C, Clase D, Clase K o una combinación de clases. Estas clasificaciones se refieren a el tipo de incendios que puede apagar su extintor. A continuación, se muestra una breve descripción de cada clase:
| Clase | Descripción |
|---|---|
| Clase A | Apaga incendios de materiales sólidos como madera, papel, tela, plástico, entre otros. |
| Clase B | Apaga incendios de líquidos inflamables como gasolina, aceite, pintura, solventes, entre otros. |
| Clase C | Apaga incendios de equipos eléctricos energizados como cables, interruptores, electrodomésticos, entre otros. |
| Clase D | Apaga incendios de metales inflamables como magnesio, titanio, sodio, entre otros. |
| Clase K | Apaga incendios de grasas y aceites de cocina en restaurantes y establecimientos de comida. |
Conociendo el modelo y la clasificación del extintor, será más fácil determinar qué tipo de fuegos puede extinguir y, por lo tanto, utilizarlo correctamente en caso de emergencia. Además, es importante asegurarse de que el extintor esté en buen estado, con la presión adecuada y dentro de la fecha de vencimiento para garantizar su eficacia.
¿Cuánto tiempo dura un extintor de CO2?
El mantenimiento y retimbrado de un extintor de CO2 es similar al de otros tipos de extintores. Se recomienda realizar una revisión periódica cada 3 meses por una empresa especializada en instalación y mantenimiento contra incendios, como ZENITH. Durante esta revisión se verifica que el extintor esté en buen estado, que no haya fugas ni obstrucciones en las boquillas y que el manómetro indique la presión adecuada.
Además, cada 5 años se debe realizar un retimbrado, que consiste en una revisión más exhaustiva del extintor, donde se desmonta y se revisan todos sus componentes. Durante este proceso se pueden reemplazar piezas desgastadas o dañadas y se realiza una prueba hidrostática para garantizar la resistencia del cilindro. Este retimbrado se debe realizar hasta que el extintor alcance los 20 años de antigüedad, si no ha sido utilizado.
Es importante tener en cuenta que la vida útil de un extintor de CO2 no se mide en términos de tiempo, sino en función de su capacidad de funcionamiento y mantenimiento adecuado. Por lo tanto, es posible que un extintor de CO2 dure más de 20 años si se ha mantenido en buen estado y nunca ha sido utilizado. Sin embargo, es recomendable seguir las pautas de mantenimiento y retimbrado establecidas para garantizar su eficacia y seguridad.